Acabo de ver esta película del 2008. Que no voy a haceros aquí la crítica, tranquilos, que no es mi formación, ni mi vocación ni hasta ahí llegan mis pretensiones. Pero que me gusta muchísimo compartir con vosotros las cosas que me gustan. Y la peli ME HA ENTUSIASMADO. Lo mejor que he visto en los último tiempos – y. modestia aparte, el nivel es alto -.
Me encanta el cine político. Desde “Danton” a “Buenas Noches, Buena Suerte”, pasando por “Rojos”, “La Vida de los Otros” o “El Hundimiento”. Y tantísimas otras, que soy injusto sin querer. Porque el poder es el tema de nuestro tiempo. Porque es el tema de siempre. Porque nos afecta, porque nadie está a salvo.
Es por eso que, el que no la haya visto y le guste este tipo de cine, que se la beba. Salvando las distancias – y sin salvarlas, creo -, Shakespeare puro. Os dejo con mi escena favorita, el nudo gordiano: la conversación nocturna de Nixon borracho con Frost previa a la confrontación definitiva. El desafío. Sólo uno podía vencer.
No sé, a ver si compartís mis puntos de vista. Y os remito a algunas entradas más abajo: “El Poder y la Mentira”.